Los frutos se maceran en el mosto a baja temperatura (“maceración pelicular”) durante 48 horas para saturar al máximo los sólidos de los mostos sin colorearlos demasiado. La fermentación se lleva a cabo a una temperatura muy baja de 15°C para obtener el máximo sabor a fruta posible.
Bordeaux Clairet es particularmente aromático y tiene un color rojo frutal muy profundo. También es más sustancioso que los rosados tradicionales, con buen cuerpo y una frutalidad exuberante. Esta redondez y estructura más pronunciada lo convierte en un rosado perfecto para la gastronomía.